Las pruebas de aceptación son un recurso fundamental durante el desarrollo de un sistema basado en la metodología ágil.
La satisfacción del usuario es uno de los factores clave para determinar el éxito de una aplicación de software. En caso de no encontrarse, el impacto se vería reflejado negativamente en la captación de clientes y los ingresos registrados en las ventas de las empresas.
De ahí la importancia de los desarrolladores durante la etapa de pruebas o testing software. Su labor reside en garantizar que los sistemas operen correctamente antes y después de lanzar una aplicación al mercado, ya que en el camino pueden resultar algunos defectos que pongan en riesgo tanto a los productos informáticos como la reputación de las marcas.
Como parte del conjunto de pruebas a ejecutar se ubican las pruebas de aceptación del usuario —UAT por sus siglas en inglés—, que ocurren en la fase final del ciclo de vida del desarrollo del software.
A diferencia de otro tipo de test —como las pruebas unitarias o de integración— las pruebas de aceptación se llevan a cabo por los usuarios finales, quienes establecen una relación directa con las aplicaciones o sistemas desarrollados.
Esto permite conocer el desempeño del producto en escenarios reales o muy cercanos a lo que sucederá en el uso constante.
De acuerdo con la definición propuesta por el Comité Internacional de Certificaciones de pruebas de Software (ISTQB, por sus siglas en inglés), las pruebas de aceptación se centran en las necesidades y requisitos de los clientes.
Lo anterior nos indica que más allá de los defectos encontrados con este tipo de test, la finalidad de su aplicación es verificar si los sistemas desarrollados son realmente efectivos o se desalinean con los objetivos de negocio planteados.
A pesar de esto, la detección de errores sigue siendo una de las intenciones imprescindibles.
El desarrollo de un sistema de software no es una tarea sencilla, tanto por el nivel de conocimientos involucrados como por la cantidad de elementos que intervienen en el proceso.
La complejidad de los métodos tradicionales trajo problemas a los desarrolladores —a finales de la década de los 90—, entre ellos el gasto excesivo de tiempo y retraso en los resultados finales. Esto obligó a que la comunidad de la industria del software se uniera para implementar nuevas y mejoradas prácticas en su labor.
El Manifiesto Ágil fue una de ellas, con el cual propusieron segmentar las entregas de avances de los productos informáticos en sprints, definidos como periodos breves estipulados para completar una parte representativa de los proyectos.
Las pruebas de aceptación son un recurso fundamental durante el desarrollo de un sistema basado en la metodología ágil. Con base en los principios sugeridos en esta, es posible aplicar los “tests” durante los diferentes sprints, sin la necesidad de esperar a etapas más avanzadas.
De esta manera, las pruebas de aceptación se ejecutan ágilmente para corregir los errores oportunamente.
Encuestas de investigación aplicadas por Zippia indican que los proyectos ejecutados bajo la metodología ágil tienen una tasa de éxito del 64%, comparado a un 49% de los realizados mediante metodologías tradicionales o de cascada.
Además, las empresas que adoptaron este método experimentaron un crecimiento promedio del 60% en ingresos y ganancias. Una razón más para implementar las pruebas de aceptación durante un proyecto basado en esta metodología.
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Como lo mencionamos anteriormente, las etapas de testing software se determinan acorde al ciclo de vida del mismo. Dependiendo de la fase de desarrollo en la que se sitúe, se ejecutarán tests para evaluar los requisitos deseados.
Las pruebas del sistema son otro tipo de test que ayuda a verificar el comportamiento de los productos informáticos. A diferencia de las pruebas de aceptación, estas son validadas con base en el criterio de los desarrolladores, es decir, sin la intervención de los usuarios o clientes finales.
Tipos de pruebas de aceptación
Las pruebas de aceptación se clasifican en varios tipos de acuerdo al procedimiento aplicado. A continuación te mencionamos algunas de ellas:
Las pruebas de aceptación beta se llevan a cabo en lugares específicos —regularmente desde los dispositivos en los que se alojará el software— para que los usuarios interactúen desde ahí, sin la presencia o intervención de los ingenieros informáticos.
Finalmente, su respuesta es intercambiada con los desarrolladores para realizar cambios o mejoras, en caso de requerirse. En este caso son usuales las pruebas piloto.
Este tipo de prueba depende completamente de la información proporcionada por los usuarios finales, en relación con su experiencia con el producto de software. Por tal motivo, los desarrolladores les proporcionan las aplicaciones, la página web o el sistema desarrollado para que ellos interactúen con él y emitan un informe sobre el mismo.
Quienes la ejecutan suele ser personal interno o de confianza a la organización.
Las pruebas de aceptación de contrato están basadas en los acuerdos estipulados con los proveedores o la persona para la que se trabajó el producto informático. En caso de faltar con algún punto acordado, el sistema se puede rectificar o, si el cliente lo determina, iniciar una acción legal que obligue a su cumplimiento.
Este tipo de prueba de aceptación aplica para los productos informáticos elaborados para una institución gubernamental o instancia en la que exista un marco normativo de por medio. Las autoridades a cargo son las responsables de verificar que el proyecto cumpla con los requisitos estipulados.
Las pruebas de aceptación del usuario son unas de las más comunes, al ser el cliente final quien valide si una función específica es idónea o no. Por lo regular, se aplican pruebas basadas en escenarios reales o muy cercanos a la versión final del producto.
En esta prueba se observan aspectos generales del sistema durante un escenario simulado, para verificar que su funcionamiento y los procedimientos ejecutados sean óptimos. La seguridad, la velocidad, el rendimiento, entre otros, son algunos de los aspectos a evaluar.
Después de conocer los aspectos principales de las pruebas de aceptación de software, reconocerás la importancia de su aplicación en el ciclo de vida de un producto informático.
Si aún no las pones en práctica o estás en proceso de hacerlo, es probable que surjan dudas o necesites la orientación de profesionales capacitados y con experiencia en este tipo de pruebas.
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